Francisco Medina Palmeros
Ciudad Cardel, Veracruz
Aunado a las rachas de 280 kilómetros por hora del ciclón “Karl”, cuyo ojo pegó en esta ciudad y su municipio de La Antigua, como si no hubiese bastado, sobrevino horas después el bruto golpe de agua tras el desbordamiento del río La Antigua, mismo que destruyó todo lo que a su pasó encontró, no respetó absolutamente nada, ni a pobres ni a ricos, ni a bellas o feos. Todo se lo llevó, no perdonó nada.
Las gráficas aquí presentadas no requieren de muchas palabras para ver la magnitud del meteoro, único en toda la historia de esta circunscripción veracruzana, de acuerdo a reportes oficiales y a comentarios de ancianos que se han quedado, como todos los que por acá vivimos, boquiabiertos y los cuales aseguran que en nada se compara “Karl” a “Janet” que en 1955 igual hizo de las suyas por acá.
Pobladores aseguran que “Karl” nos dio a los jarochos puñetazo (ventarrón) y patada (crecida de ríos).
